¡Que se paren los relojes!
¡Que los ríos se detengan!
Que en el cielo no halla estrellas
Y que el sol nunca aparezca.
Mira donde llega mi rabia,
Nunca voy a perdonar,
A aquel que siembra miseria,
Cuando la pudo evitar.
No se porque digo esto,
¿Será por que siento pena?
De este modo tan funesto,
Sin rumbo es como navega.
Yo me baso en las injusticias
Contenidas en el mundo entero,
Unos que lo tienen todo,
A costa del pordiosero.
Ya se que por mucho que diga,
Las cosas que van pasando,
Nunca se van a arreglar
En este mundo malvado.
Si todo el mundo pensara
Que no hay ninguna razón
De portarnos con malicia,
Si practicar el perdón.
No se porque me preocupo
De tanta injusticia social,
Que se comete en el mundo,
Yo, no lo puedo evitar.
Y aquí termina este sueño
Que tanta pena me dá,
Aunque me tenga por loco
Dentro de esta humanidad.
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